La costumbre de encender velas en Navidad, cuentan que proviene del momento en que la Virgen María trajo al mundo al Niño a la luz de una vela en un pesebre de Belén. Encenderlas, simboliza la luz que viene al mundo. En los hogares se encienden velas de colores, cada una de ellas con un significado distinto: amarilla para el dinero y el trabajo; roja para el amor; azul o blanca para la paz y tranquilidad, y verde para la esperanza.
En cuanto las estrellas de Navidad hacen referencia a la historia que cuenta que sus Majestades, Los Reyes Magos consiguieron llegar a Belén gracias a una estrella, que fue la que anunció la llegada de Jesús y les guió hasta el pesebre donde se encontraba. Por ello, las estrellas representan y simbolizan luz y esperanza. Aunque pueden tener formas y colores muy variados, este significado no varía y se suelen colocar en lo más alto del árbol de Navidad.
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