Este sencillo hechizo nos ayudará a la hora de ponernos
delante de nuestro futuro jefe, que seguramente nos va a poner en algún
aprieto, por el tipo y la forma de hacer las preguntas.
Es un ritual para no
ponerse nervioso y dar una imagen de seguridad y firmeza personal, cosa que
valoran mucho las empresas:
Solo necesitaremos:
- Un imperdible
- Un trozo de cáscara de limón
- Un trozo de cáscara de naranja
- Un botón de cuatro agujeros
Coge el imperdible y se le inserta un trozo pequeño de
cáscara de limón, otro de naranja, un crucifijo o medalla de algún santo al que
le tengamos mucha devoción y un botón de cuatro agujeros. Guárdatelo en el bolsillo o en el bolso cuando vayas a
hacer la entrevista de trabajo y como siempre, no olvides ir con actitud
positiva.
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